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Singapur ha lanzado la Ley de Enfermedades Infecciosas para instar a los empleadores a adoptar acuerdos laborales flexibles en un esfuerzo por minimizar la propagación de COVID-19. A partir del 2 de abril, el gobierno tipificó como delito a los empleadores que no tomen las medidas adecuadas cuando y donde sea posible. Los empleadores que no pongan a disposición de sus empleados instalaciones para trabajar desde casa cuando sea posible podrían ser multados con hasta 10,000 dólares singapurenses (aproximadamente 7000 dólares estadounidenses) y/o encarcelados hasta por seis meses en virtud de los cambios en la Ley de Enfermedades Infecciosas.
CARACTERÍSTICAS
- Según la ley, toda empresa debe proporcionar las instalaciones necesarias para que todos los empleados puedan teletrabajar. Las empresas también están obligadas a dar instrucciones a sus empleados para que trabajen de forma remota, a menos que "no sea razonablemente posible hacerlo".
- Los empleadores deben implementar horarios específicos de llegada y salida para los empleados que no pueden teletrabajar, para minimizar el contacto físico entre el personal.
- Los empleadores deben tomar medidas para garantizar al menos 1 metro entre cada persona en el lugar de trabajo, respetando las medidas de distanciamiento social.
- Los visitantes no deben llegar al mismo tiempo ni permanecer más tiempo del que se considere necesario.
RESULTADOS EN CURSO
- Según el Ministerio de Mano de Obra, hasta ahora alrededor del 40 por ciento de las empresas del Distrito Central de Negocios han permitido a sus empleados trabajar desde casa. A medida que se aplique más la nueva regulación, se espera que este porcentaje aumente.
Fuente: Canal de noticias de Asia